Los puestos de niñera interna pueden ser una oportunidad increíble para crecer profesionalmente y convertirse en un miembro apreciado de una familia. Pero incluso con las mejores intenciones, las cosas no siempre salen como se planean. Vivir donde se trabaja puede desdibujar los límites, provocar agotamiento o, simplemente, resultar insostenible a largo plazo.

Si tu puesto de niñera interna no va como esperabas, es importante que sepas que no estás estancada. Hay medidas prácticas y respetuosas que puedes tomar para mejorar tu situación antes de plantearte cambiar a otra que encaje mejor.

1) Cómo saber que tu trabajo de niñera interna no funciona

No todos los trabajos de niñera interna son perfectos. Aunque es normal que al principio haya cierta adaptación, los problemas continuos pueden ser una señal de que ha llegado el momento de replantearse las cosas. Algunas señales comunes son:

  • Falta de intimidad o tiempo de inactividad: tienes la sensación de estar siempre "conectado", con poco tiempo para relajarte o recargar pilas.
  • Límites poco claros: siempre se espera que ayudes fuera del horario acordado o que te encargues de tareas que no sean el cuidado de los niños.
  • Agotamiento o agotamiento emocional: con frecuencia se siente abrumado, ansioso o emocionalmente agotado.
  • Desconsideración del espacio personal: se entra en sus dependencias privadas sin previo aviso o no se respeta su tiempo libre.

Si estás experimentando alguna de estas señales de alarma, es hora de reflexionar sobre lo que necesitas para sentirte apoyado y feliz en tu puesto.

2) Cómo hablar de ello con la familia

Comenzar una conversación sobre la experiencia de vivir con una niñera puede resultar incómodo, pero una comunicación clara es la mejor manera de ver la diferencia y asegurarse de que todos están de acuerdo. He aquí cómo enfocarlo:

  • Programe una reunión formal - Evite sacar a relucir sus preocupaciones en momentos caóticos. En lugar de eso, pide un momento en el que podáis sentaros juntos sin interrupciones.
  • Empieza por lo positivo: reconoce lo que aprecias del puesto antes de compartir tus preocupaciones.
  • Sé sincero y concreto: utiliza frases en las que digas "yo" (por ejemplo, "me cuesta relajarme cuando me abordan fuera de horario") para comunicar cómo te está afectando el acuerdo.
  • Sugiere soluciones: ya sea un horario revisado, unas expectativas más claras o medidas adicionales de privacidad, ofrece ideas que puedan hacer más sostenible el contrato de la niñera interna.

La mayoría de las familias valoran los comentarios sinceros y quieren que su niñera se sienta feliz y apoyada en casa. Puede que algunas simplemente no se den cuenta de cómo les afecta esa dinámica.

3) Establecer límites como niñera interna

Los límites son esenciales para todas las niñeras, pero especialmente para las niñeras internas. Sin expectativas claras y espacio personal, el agotamiento es un riesgo real. He aquí cómo salvaguardar tu bienestar:

  • Define tus horas de trabajo - Asegúrate de que tus horas están documentadas en tu contrato de niñera y de que la familia las respeta. Eso no significa que un atasco ocasional que provoque retrasos sea un motivo de ruptura total. Pero las necesidades constantes fuera de horario o una falta general de respeto por tu tiempo libre pueden ser motivo de preocupación.
  • Dedícate tiempo personal: asegúrate de que puedes disfrutar de tus horas libres como te apetezca, respetando las normas de la casa, por supuesto. El espacio privado que se te ha proporcionado debe tratarse como tal.
  • Salga de casa cuando no esté de servicio - Salga a dar un paseo, reúnase con amigos o dedique tiempo a realizar actividades en solitario. Esto puede ayudar a reforzar la separación entre el trabajo y el tiempo personal.
  • Utiliza calendarios compartidos: ayuda a la familia a visualizar tu disponibilidad y facilita la planificación semanal.

Si no estás seguro de cómo establecer estos límites y trabajas con una agencia, pide consejo. Una agencia que te apoye te ayudará a defender tus necesidades y te proporcionará recursos para crear un acuerdo sostenible de niñera interna.

4) Cuándo plantearse seguir adelante

A pesar de tus mejores esfuerzos, algunos trabajos de niñera interna simplemente no encajan, y eso está bien. Reconocer que un trabajo no funciona es señal de crecimiento y autoestima, no de fracaso.

Si el entorno sigue afectando a tu salud o felicidad a pesar de la comunicación abierta, puede que haya llegado el momento de iniciar una transición profesional. Mantén una conversación sincera y profesional con la familia y hazles saber que has decidido poner fin a tu colaboración. Asegúrate de revisar tu contrato para saber cuánto tiempo de preaviso es necesario y cualquier otro detalle sobre el fin del contrato.

Comunique a su agencia su experiencia. Pueden ayudarte a dar los siguientes pasos y ponerte en contacto con una familia cuyas necesidades y dinámica se ajusten mejor a las tuyas.

Ser niñera interna puede ser increíblemente gratificante, pero eso no significa que esté siempre exento de desafíos. Si reconoces los signos de agotamiento, te comunicas con cuidado y proteges tu espacio y tu horario, puedes abogar por una experiencia más saludable y satisfactoria.

Y si ha llegado el momento de seguir adelante, tampoco pasa nada. Un puesto que no funciona no define una carrera. Eres una persona valiosa, profesional y atenta, y te mereces un puesto en el que encajes a la perfección.

¿Necesita ayuda para encontrar su trabajo actual de niñera interna o para encontrar su próximo trabajo? Westside Nannies está aquí para ayudarle en cada paso del camino.