Contratar a una nueva niñera para que cuide de sus hijos no es una decisión que deba tomarse a la ligera. Es una relación profesional seria y un compromiso a largo plazo que tendrá un impacto duradero en el crecimiento y desarrollo de sus hijos. Por eso, a menudo hace falta algo más que una o dos entrevistas y una comprobación exhaustiva de las referencias para saber si la candidata en la que ha puesto el ojo es realmente la más adecuada para su familia. Y una de las mejores formas de saber si está preparado para tomar la decisión final de contratar a una niñera es ver a la posible nueva en acción durante un día de prueba.

Un día de prueba de la niñera suena como una prueba importante y potencialmente estresante, pero no es eso en absoluto. En realidad, es una oportunidad para que tus hijos conozcan a la niñera e interactúen con ella en un ambiente de poco estrés, como en una cita de juegos, y es una oportunidad sin compromiso para que evalúes tanto las aptitudes profesionales de la niñera como la forma en que su personalidad y sus valores influyen en su forma de hacer el trabajo.

¿Cómo es un día de prueba?

El día de prueba típico tiene lugar una vez finalizadas las entrevistas y dura unas cuatro horas, aunque puede ser más largo o más corto según sus preferencias. La candidata debe cobrar por su tiempo y, antes de la prueba, debes dar instrucciones a la niñera, igual que harías si cuidara de tus hijos en cualquier otro momento.

Haga que la niñera conozca sus rutinas habituales y cualquier información pertinente que necesite saber para tener éxito, ya sea que su hijo en edad escolar tiene que estar en la parada del autobús a las 3 de la tarde o que su hijo pequeño sólo beberá del vaso azul con dos cubitos de hielo. El día de prueba se trata de ver cómo trabaja la niñera, pero también de establecer si una candidata potencial conecta o no con su familia y se siente como una buena pareja. Si se les deja sin directrices ni preparación, es posible que estén tan preocupados por realizar bien las tareas básicas del trabajo que no tendrás oportunidad de evaluar mucho más.

Mientras la niñera esté trabajando, haz lo posible por reflejar tu propia rutina diaria. Aunque la observación es importante, no querrás pasarte el ensayo microgestionando a la niñera y negándote a que te demuestre lo adaptable y agradable que puede llegar a ser. Si sueles trabajar durante el día, trabaja parte del tiempo que esté la niñera. Si eres un padre que se queda en casa y vas a trabajar junto a la niñera, asegúrate de hacerlo para que podáis ver cómo es realmente trabajar juntos. Recuerda que el día de prueba también se da a la niñera la oportunidad de ver lo que realmente implica el trabajo, por lo que es importante darle las herramientas que necesita para brillar.

¿En qué hay que fijarse durante un día de prueba?

Aprovecha el día de prueba para buscar las cualidades que son más importantes para ti como padre. Ninguna niñera recién llegada va a entrar en tu casa y saber automáticamente cómo te gusta que esté organizado el cuarto de juegos y dónde guarda su mantita el más pequeño. En lugar de centrarte en la perfección de las tareas, céntrate en la personalidad y el potencial. ¿Es alguien que parece enérgico y entusiasmado con su trabajo? ¿Muestra iniciativa? ¿Cómo responden los niños a esta persona? ¿Hace la niñera un buen trabajo manteniendo a los niños ocupados y activos?

En definitiva, una niñera es mucho más que una persona que cuida de sus hijos. Es una profesional cualificada y una parte esencial de su vida cotidiana y, con el tiempo, también puede convertirse en un miembro importante de la familia. Como padre, usted debe decidir qué rasgos le indican que un candidato es merecedor de esas distinciones. Al final de una prueba satisfactoria, debería saber si la niñera que está considerando no sólo es alguien en quien confía que puede crecer en su función, sino también si es alguien que cree que puede ocupar un lugar positivo y duradero en su hogar.